Evnika Zarina: egresada del CICESE fundó una escuela de cultivo hidropónico
Evnika es egresada de Ciencias de la Vida, tomó un camino diferente
La doctora Evnika Zarina Medina Romo es una mujer inquieta. Oceanóloga y acuicultora de profesión, además Dr. en Ciencias de la Vida por el CICESE, es también madre y fundadora de Jamaak escuela verde, un centro de capacitación sobre tecnicas de cultivo alternativo y ecotecnias. La carrera de Evnika no tomó el usual camino de la investigación o la academia, ella se salió del molde. En lugar de pasar los días en un laboratorio o en trabajo de campo -lo cual sin duda también disfruta-, planta hermosas lechugas con hojas chinas de diversos colores y texturas en los invernaderos de su hogar. Denota plenitud en la alegría de su carcajada y en su sonrisa risueña, vista a través de una videollamada. Cómo no ser feliz, si hace lo que ama y al salir de su casa acaricia su cara el aire de San Antonio de las Minas. Entra a uno de sus invernaderos y contempla los resultados de su trabajo: lechugas cultivadas con el método de la hidroponía, un sistema de producción en el cual las plantas no enraízan en la tierra -no requieren suelo-; lo hacen en disoluciones minerales que proporciona los nutrientes necesarios para su crecimiento. Evnika emprendió esta aventura entre 2005 y 2008, y no la soltó. ¿Quién es Evnika? Evnika es licenciada en Oceanología por la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), y obtuvo la maestría y el doctorado (2018) en Ciencias de la Vida en el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE). La acuicultura siempre estuvo presente en sus temas de investigación. Para su tesis de licenciatura eligió investigar el abulón azul; en la de maestría, el abulón rojo. Ya en el doctorado, optó por estudiar la tilapia pargo-UNAM, un pez tetra-híbrido desarrollada en México y mejorado genéticamente con fines acuícolas. Presente como directora de sus tres tesis se mantuvo la Dr. Ana Denise Re Araujo, investigadora del Departamento de Biotecnología Marina de este centro de investigación, quien fue su mentora tanto en la Facultad de Ciencias Marinas de la UABC como en el CICESE. El método de la acuaponía Fue durante el doctorado que Evnika, sumado a su ya consolidado interés por la hidroponía, se sintió atraída por la acuaponía -sistema que relaciona la acuicultura y la hidroponía-, que es la producción de peces y hortalizas que trabajan en sinergia y comparten agua, en este caso agua dulce. Las bacterias de los peces funcionan como fertilizante natural para las plantas, y a su vez, éstas regresan agua limpia a los peces. Esta técnica es totalmente sustentable, pues ahorra agua y elimina el uso de químicos. Pese a haber realizado proyectos sobre acuaponía durante su estancia como estudiante de doctorado, hoy en día Evnika no utiliza este método en su cultivo de lechugas debido a la alta inversión que requiere. “La acuaponía no conviene al realizarse en pequeña escala, es muy diferente poner un sistema hidropónico en donde únicamente tienes las plantas, su bomba, sus fertilizantes, su aireación, todo en un sistema. Es mucho más económico comprar fertilizante que alimento para peces”, explicó Evnika, pero compartió que en el futuro, si hay los recursos y Jamaak escuela verde crece aún más, no descarta iniciar con un sistema de producción acuapónico. Así surgió Jamaak escuela verde Jamaak escuela verde se fundó oficialmente en 2008 como un centro de capacitación para enseñar métodos alternativos al cultivo habitual, actualmente cuenta con cursos y talleres de hidroponía, compostaje, cultivo de cannabis y huertos urbanos, impartidos por Evnika y otros expertos. El primer invernadero lo construyó el esposo de Evnika en el terreno de su hogar tres años antes, en 2005. Posteriormente, fue beneficiaria de un programa del gobierno federal (SADER) y se edificó uno más grande, pero lamentablemente este se cayó en una tormenta. Con los años, Evnika continúo impulsando el proyecto, y a la par de ofrecer talleres y trabajar cultivo hidropónico, concluyó sus estudios de posgrado. Finalizar la maestría y el doctorado tampoco fue sencillo. Al ser madre de dos niños, uno de ellos con necesidades especiales, todo fue más complejo. Evnika también decidió sacrificar mucho, como la búsqueda de trabajo como oceanóloga y acuicultora para tener mayor flexibilidad y disponibilidad del tiempo para los tratamientos, terapias y clases de educacion especial de su hijo, y al mismo tiempo dedicarse a la hidroponía. “Gracias a ese sacrificio que hice soy tan feliz de que mi hijo está en la universidad, estudia administración de empresas. De repente me iba mal y de repente muy bien. Así ha sido este camino, nada fácil, pero te digo, acá lo que nos detiene a veces es la inversión; el resto tiene solución”, aseguró Evnika. Jamaak también vende producto Además de ofrecer capacitaciones a la población interesada, la entrevistada compartió que se han impartido talleres -en coordinación con dependencias gubernamentales-, a mujeres pertenecientes a comunidades indígenas. Estos cursos han sido reconocidos por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), autoridad que ha avalado los talleres y firmado las constancias para estudiantes. Asimismo, Jamaak ofrece a la venta los productos cultivados en los invernaderos hidropónicos de Evnika, lechugas mixtas listas para comer son adquiridas por mercados y restaurantes de la localidad para la venta al público. Proyectos de Evnika y Jamaak Fiel la inquietud feroz que late en su pecho y a su amor por el cultivo, la Dra. Evnika detalló que actualmente tiene en puerta una investigación independiente sobre nutrición alternativa de plantas, iniciativa surgida en la búsqueda de opciones frente al encarecimiento de los fertilizantes. Evnika señaló que además de esta investigación, trabaja en el diseño de un proyecto de maricultura en el desierto, esto tras ser buscada por ejidatarios de López Collada, en Puerto Peñasco, Sonora. Respecto a Jamaak escuela verde, Evnika y su equipo planean un taller de cultivo de hongos, próximamente también ofrecerán otro curso sobre huertos urbanos. Sumado a esto, Evnika desea elaborar un cultivo indoor, es decir, en un contenedor. También se busca retomar la periodicidad de los talleres e impulsar las capacitaciones en línea. Invita a jóvenes a buscar alternativas Como consejo a los más jóvenes estudiantes de Ciencias de la Vida y ramas afines, Evnika enfatizó en la importancia de abrirse a otras áreas de conocimiento, buscar la manera de ejercer la profesión, pese a no encontrar el trabajo soñado en la empresa ideal. También los motiva a que busquen la manera de monetizar sus proyectos, tomar educación financiera y administrativa, así como acudir a cursos sobre formación de negocios. “Todos los que estudiamos en centros de investigación públicos tenemos un compromiso muy grande con la sociedad para que a las personas les vaya mejor. Nosotros somos núcleos celulares, hay que hacer crecer esas células y multiplicarnos”, concluyó Evnika. |